¿Sólo por el Placer de Hacerlo?

Sí, lo hago solo por placer. No niego que me gustaría que tuviera consecuencias adicionales: que otros disfruten lo que hago, que más gente sienta interés en conocerlo y dejar huella en ellos. Esta es una actividad que se planea en solitario, por lo cual nada garantiza que al ponerlo en práctica tenga buena aceptación. Con pocas excepciones termino tocando la sensibilidad de alguien -ocasionalmente, muy a mi pesar, en forma negativa- por lo que me esfuerzo en hacerlo lo mejor posible sin tener la garantía de lograrlo.

Escribir es una actividad solitaria, un poco ingrata algunas veces, que finalmente se realiza por la necesidad personal de compartir pensamientos y sentires con otros seres humanos. Plasmar ideas en un papel o una pantalla es un compromiso conmigo misma y con Dios, es una manera de decir a otros sobre una experiencia o reflexionar sobre un tema en particular.

Disfruto mucho cuando alguien me dice que le gustó uno de mis escritos, más cuando es una persona que vive en un sitio distante, porque siento que una parte de mi viaja hasta el lugar y el momento donde ella está y así me hago partícipe de su realidad, de su momento vital. Es una satisfacción hacerme merecedora de que una persona dedique algunos minutos de su vida para conocer lo que escribí en un momento dado, por cuanto valoro el significado que tiene la atención que prodiga a mis escritos. Si en algo ayudo o aporto a la vida de uno de mis lectores me considero privilegiada aunque también estoy consciente de la responsabilidad que implica publicar un mensaje.

Sí, me gusta escribir y publicar... sólo por el placer de hacerlo.